Raúl García Cañizal fue un inmigrante español oriundo de Salamanca, llegó a Venezuela en 1957 y se instaló en la Guaira con su esposa Erundina (gallega) quien fallecería en 1974, dejando a su cuidado a los 3 hijos que tenían en conjunto. Raúl probó suerte en distintos oficios desde su llegada a Venezuela. Trabajó como albañil, pescador, panadero y taxista. En un país colmado de oportunidades, sin miedo al trabajo y por vueltas de la vida, Raúl llegó a Canaima en 1978. 

Empezó apoyando a otros operadores como guía y no tardó mucho en decidir que Canaima sería su vida. Tan pronto como sus ahorros se lo permitieron, Raúl adquiere Canaima Tours C.A. con su concesión a orillas de la Laguna. A esta empresa que empezó con una curiara y una cava, la convirtió en el sistema logístico más importante de la zona, llegando a armar una flota de más 40 embarcaciones (curiaras) y trabajando con grupos de más de 300 personas que para aquel momento venían a Canaima desde todas partes del mundo.

Así fue como Raúl, con el apoyo incondicional de sus hijos Castor, Rosa y Mary, y de un equipo de grandes personas a quienes recordamos con cariño, dejó una empresa sólida, una relación con pueblo Pemón –que abrió sus puertas a la familia–, el amor por la naturaleza y un hogar para generaciones venideras.

En 1989 Mary conoce en Canaima a Julián Rodríguez, capitán de DC-3. A Julián aparte de volar aviones, se le daba muy bien la construcción. Juntos, poco a poco, en familia, construyeron Wakü Lodge, que se inauguró en 2002. Julián además se aventuró en su propia empresa de aviación.

Casi 25 años después de haber llegado a Canaima, la familia, ahora extendida, podía ofrecer la experiencia completa: traslado aéreo, alojamiento y excursiones. 

Hoy somos un equipo de más de 130 personas que hacen posible su experiencia de viaje. 50 residen en el Parque Nacional Canaima, en su mayoría separados de sus familias. Agradecemos a cada miembro de nuestro equipo por los sacrificios realizados, por su trabajo honesto e incondicional. 

Estamos orgullosos de nuestros inicios, nostálgicos por el paso del tiempo y la despedida de quienes comenzaron este proyecto, pero mantenemos nuestra mirada hacia adelante, siempre entregados al sueño del Parque. Hoy, nuestro mayor objetivo es proteger el Parque Nacional, mejorar nuestras prácticas para que sean más sustentables y sostenibles en el tiempo, seguir mejorando las condiciones de nuestro equipo y ofrecer a nuestros huéspedes la mejor experiencia en Canaima.